La potranca entrerriana Loba Salvaje con la monta de Carlos Benítez alcanzó una gran victoria sobre Chimi Melo, potrillo que la había quebrado en los 250 metros finales. Mucho público ayer en Las Flores.
No fue de la partida el potrillo Ted, sindicado en los papeles previos como el candidato de la prueba, a este se le sumaron las ausencias de Chiche Sky y Alpha Sky, quedando el duelo reducido a cinco participantes.
En el salto por el centro de la pista dominó Chimi Melo, pero enseguida por dentro se acomodó la potranca Loba Salvaje con la monta de Carlos Benítez. En los primeros 100 metros, la punta cambió de dueño, ya que fue la entrerriana la que pasó a dominar, mientras desde atrás y muy abrigado a los palos la zaina L’ Forge ganó mucho terreno, logrando pasar a dominar antes de meterse en el codo del golf.
Pasaron por los 800 y el avance de Loba Salvaje dio frutos, llegando a emparejar a la puntera, recorriendo esta parte con ambas potrancas luchando cabeza a cabeza. Cuando pasaron por los 600, el andar de la pupila de Alfaro se mostraba superior por lo que en pocos metros cortó luz para meterse en la recta con claras ventajas sobre sus rivales.
En los 400 y la puntera buscó el centro de la pista, mientras que Chimi Melo que había pasado al segundo puesto, busco los palos y se arrimó con mucho peligro. En los 300 el potrillo de Progreso entró muy fuerte, logrando pasar al frente, lanzándose en busca del triunfo.
Por el centro de la pista Benítez le pidió un esfuerzo más a su conducida y la del stud El Enrique respondió, volviendo a emparejar, pasando al frente en los metros finales, logrando dos cuerpos en la sentencia.
El cronómetro marcó 1 minuto 17 segundos 92 centésimas, un registro realmente notable para ejemplares de tres años que están dando sus primeros pasos. Gran faena de Carlos Maximiliano Benítez que nunca abandonó a su conducida, sobre todo en plena recta cuando parecía que Chimi Melo por dentro se quedaba con el éxito.
Desprolijidades
Mucha gente en Las Flores, sobre todo dentro de la pista, que en cada carrera se vio invadida con el peligro que esto conlleva, tanto para los asistentes, como para los jinetes y caballos. También el público a lo largo de toda la tarde ocupó lugares en los cuales solo deben estar los protagonistas, como el sector del ingreso al pesaje que se dejó de realizar a la vista del público, por lo que los jockeys ante de cumplir con este fundamental trámite, debían atravesar por mucha gente, siendo este un detalle que no le otorga transparencia a la actividad. Entre otras cosas, el programa definitivo de carreras se conoció en las últimas horas del viernes, haciendo imposible el trabajo de la prensa. Lamentablemente Las Flores parece perder seriedad en cada jornada.